BURLAS

13 mayo, 2012

Escribe EDGAR R. CONDE CARMONA

edgarconde@indicemedia.com.mx / www.twitter.com/su_excelencia

Es una gran mentira que tres años sean insuficientes para ejecutar un Plan Municipal de Desarrollo. No, cuando hay un verdadero trabajo de planeación y ejecución.

Por eso resulta una burla que Pedro Pérez Lira y Blanca Águila Sánchez, alcaldes de Tlaxcala y Zacatelco, respectivamente, hayan salido a convocar a casi un tercio de los munícipes de Tlaxcala (18 de 60) para promover una reforma constitucional que les permita prolongar los periodos a cuatro años, en las presidencias municipales.

Resulta una burla porque, en caso de ser aprobada la reforma al artículo 90 de la Constitución de Tlaxcala, la modificación no se cumpliría sino hasta que haya cambio de administraciones municipales.

Es decir, una modificación de esta naturaleza violentaría el estado de derecho, pues los titulares de las actuales administraciones juraron el cargo por un periodo de tres años y no por cuatro, como pretenden.

Es irrisorio porque si los promotores de este proyecto apelan a la falta de tiempo, es porque no se aplicaron en una correcta y adecuada planeación y realizan su función, apoyados más en la improvisación que en la planeación.

O sea, se requieren argumentos de mayor peso jurídico para que dicho proyecto pueda finiquitarse.

Una burla, sí. Porque, como en el caso del presidente municipal perredista de La Magdalena Tlatelulco, José Luis Sánchez Juárez, firmó “por si pega que se amplíe un año más nuestro mandato”. Es decir, firmó sin saber lo que firmaba.

Por supuesto que es una burla, además, porque el principal promotor de la propuesta, el alcalde capitalino, Pedro Pérez Lira no ha dado la cara a los medios de comunicación para explicar a fondo su propuesta.

Por lo pronto, la propuesta fue rechazada por el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Gobernación y Justicia y Asuntos Políticos del Congreso del Estado, Silvestre Velázquez Guevara.

Según el legislador priísta, esta reforma es improcedente, al menos para que surta efecto en las administraciones municipales actuales; según el también coordinador de la bancada priísta en el Congreso local “la ley establece un periodo de mandato […] ya estamos electos para un periodo, los ciudadanos votaron para los representantes que fueron electos por ese periodo”.

De otra manera, será una gran burla contra la inteligencia de los electores, seguir con esta disparatad propuesta.