27 septiembre, 2024
La disputa por la dirigencia estatal del PAN, nuevamente viene a desnudar a las y los panistas, en un partido que solo vive del membrete en Tlaxcala.
En los últimos años, ese partido ha carecido de verdaderos liderazgos, y cuyos dirigentes han restado en lugar de sumar.
La ambición desmedida de algunos ha llevado a Acción Nacional al precipicio.
La misma renovación de la dirigencia parece una cena de caníbales, en la cual grupúsculo, sin poder político partidista buscan adueñarse con un fin, las elecciones de 2027.
Y lo principal para apoderarse de dos diputaciones (federal y local) plurinominales, en lugar de refundar a ese instituto político que algún día fue gobierno en Tlaxcala.
De ambos bandos definitivamente hay hambruna partidista, y buscan -en forma carroñera- tener un espacio donde estar en el reflector político, y vivir de las prerrogativas, y si se puede hacer “bisne”.
La traición, el coqueteo, la doble moral, el fuego amigo han marcado la pauta en Acción Nacional, y es un sector de esa militancia la que está inconforme.
Y que en su momento fueron lacayos de los reyecillos politiqueros de San Pablo Apetatitlán, el matrimonio Gutiérrez Martínez, y avecindados en Apizaco.
Si viviera Manuel Gómez Morín, fundador del PAN, en 1939 seguramente se encolerizaría al observar lo que han hecho de ese partido, partido en principios, en doctrina y en esa cena, no de negros, sino de ambiciosas y ambiciosos azules.
En las pasadas elecciones unas y unos terminaron por apoyar a Morena, como fue el caso de Julio César Hernández, y que ahora busca ser un redentor, una razón por la cual el PAN perdió Apizaco.
Lo que veremos más adelante en Acción Nacional, es una cena, insisto no de negros, sino de caníbales donde Erasmo Catarino, hará acuerdos con esas ingenuas e ingenuos panistas, para luego traicionarlos.
Quien traiciona una vez, traciona dos veces, y en Acción Nacional, es una constante entre su militancia.
¿Qué pasa en Tlaxcala?
Seguramente, las autoridades saldrán con la misma cantaleta, de que la posible privación ilegal de la linajes del empresario, Roberto de la Rosa, fue un hecho aislado.
Y lo mismo dirán de los robos a negocios, y otro tipo de ilícitos que a diario se cometen en Tlaxcala.
¡Buen fin de semana!…