29 julio, 2024
¿Usted descarta que la sacrifiquen políticamente hablando?… Esa es la pregunta que un reportero, le formuló a la morenista Ana Bertha Mastranzo, la semana pasada.
La reacción de la abanderada de Morena, en las pasadas elecciones fue de enojo, no contra el comunicador sino contra los magistrados del Tribunal Electoral de Tlaxcala (TET).
En la historia moderna de la entidad, jamás se habían desatado reacciones contra el desempeño de este organismo autónomo, aún cuando su presidente Miguel Nava, perjura que actúan con total apego a derecho, con la ley en la mano.
La determinación que tomó el propio tribunal de ordenar al Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE), de anular el triunfo de Ana Bertha ha desatado sinnúmero de reacciones.
Este sábado el ITE entregó la constancia de mayoría como diputado local por el Distrito 15 a Guillermo Jorge Hueyotlipan Barrón, postulado por el Partido Movimiento Ciudadano (MC).
Lo anterior, originó que se diera un movimiento en la reasignación de diputaciones “pluris”, donde la gran beneficiada fue Marcela González, quien ya se siente primera dama de Tlaxcala, una chica “súper poderosa”.
La excandidata Ana Bertha Mastranzo acusó que el TET actuó de manera ilegal al no notificarle a su partido Morena, en tiempo y forma, el resolutivo por el cual revocó su triunfo.
Además, responsabilizó al propio tribunal de una serie de presuntas irregularidades en las que ha incurrido para tirar su triunfo.
Dicen que Ana Bertha, está actuando en contra de los designios del poder al acudir al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).