06 febrero, 2024
La impaciencia permea en Morena, y hoy más que nunca crece la versión de que su líder nacional, Mario Delgado, resultó ser un verdadero maquillista, no de salón de belleza sino de las dichosas encuestas.
Lo anterior, para definir candidaturas, y hacerle creer al señor López que son confiables los resultados, y lo único que está buscando es que haya más votos, pero en contra de la presidencial Claudia Sheinbaum.
Por esta razón, dicen que las negociaciones con Marcelo Ebrard andan mal, y que nadie de sus compinches obtendrá ninguna candidatura en la entidad.
Los resultados para definir a los aspirantes al Senado de la República, deberá aceptarlos la cúpula morenista en Tlaxcala, deberá remar esa misma barca si desea que le inyecten más recursos al estado hasta 2027.
Sin embargo, hay otra corriente por Morena que no moverá un solo dedo a favor de José Antonio Álvarez Lima y Ana Lilia Rivera Rivera, y es ahí donde la amañada elección de Morena podría sufrir un revés.
Insisto ambos senadores que buscan la reelección no están acostumbrados a empolvarse los zapatos menos las zapatillas, y solamente simularán que harán campaña y ganar con un golpe de suerte desde el confort de la 4-T.
Y quizás fortalecer al adversario político será el único consuelo que puedan recibir varios de las y los que aspiraban al Senado vía Morena mediante el voto consensuado, pactado, el día de la elección.
Los contreras…
Mario Delegado y Armando Contreras, enviado de Morena están acostumbrados a ser eso, unos verdaderos contreras, fieles a sus acciones y discurso.
El efecto mayor, el más negativo para Morena está por venir porque quienes aspiran a una candidatura a las diputaciones federales y locales, así como a las 60 alcaldías están impacientes.
Todas y todos los que se han registrado no harán ruido en la prensa ni en las redes, en caso de no ser los ungidos en las amañadas encuestas, por lo que vendría el verdadero golpe para la estructura de esa partido.
Sencillamente, no movilizarán y harán el arte de la simulación, a fin de que desde que la Sheinbaum hasta el alcalde de su región, no obtenga los votos deseados.
Será ahí cuando Armando Contreras, un oaxaqueño acostumbrado al juego sucio -eso dicen varios que lo conocen- encontrará el verdadero pensar de los tlaxcaltecas, históricamente, a ser desconfiados.
Así de sencillo, Mario Delgado, el propio Armando Contreras, y la misma cúpula del poder en Tlaxcala tendrá que ir analizando cómo será el impacto negativo, ese voto contreras que le podría perjudicar a Morena.
Lo peor, quizás esté por venir aún cuando manejen su voto duro. Esa es la «esperanza» de México, y la desesperanza en la que han caído muchas y muchos de sus militantes.
¡Buenos días!…
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