26 diciembre, 2023
El domingo 10 de diciembre, una tragedia golpeó a una procesión de devotos ciclistas que se dirigían a la Basílica de Guadalupe desde diversos municipios de Tlaxcala. José Luis “N”, un joven recién graduado en ingeniería, perdió la vida en un desafortunado accidente en la carretera federal México-Texcoco, dejando atrás un legado de generosidad y esperanza.
La jornada comenzó con la ilusión de alcanzar la Basílica de Guadalupe, pero al descender una pronunciada bajada en el puente de Calpulalpan, una colisión con otro ciclista hizo que José Luis perdiera el equilibrio y sufriera una caída de alto impacto. Esta trágica caída le provocó múltiples lesiones y un traumatismo craneoencefálico que, lamentablemente, resultó en su muerte cerebral.
Rápidamente, José Luis fue trasladado al Hospital General de Zona (HGZ) No. 197 del IMSS en el Estado de México, donde recibió atención prioritaria por parte del personal médico y de enfermería en el área de choque. A pesar de todos los esfuerzos, los signos clínicos indicaron la muerte encefálica como consecuencia de la caída libre que le causó una fractura severa de cráneo.
Ante esta trágica pérdida, los padres de José Luis tomaron la valiente decisión de donar sus órganos, piel y tejido musculoesquelético, proporcionando así una segunda oportunidad de vida a personas que se encuentran en espera desesperada de un órgano para seguir adelante. La noble acción de la familia de José Luis brinda esperanza a más de 76 personas que se encuentran en lista de espera para trasplantes en el Hospital General de Zona 197 del Estado de México.
Un equipo médico de procuración, compuesto por especialistas de instituciones receptoras de órganos y tejidos, trabajó incansablemente durante varias horas para llevar a cabo esta generosa donación que permitirá salvar numerosas vidas.