¿Dónde iremos a parar?…

02 mayo, 2023

Dos escenas grotescas causaron revuelo en las redes sociales en las pasadas horas; el de un joven que intentó quitarse la vida y el otro de un sujeto que agredió salvajemente a su novia. Ambos casos en Tlaxcala.

En las imágenes sensibles que circulan se muestran dos hechos distintos, por demás fuertes y que nos debe poner a pensar cómo sociedad.

El intento de suicidio de un hombre en un puente de “El Molinito”, que se ubica en Apetatitlán, realmente es impactante observar cómo se lanza al vacío. ¿Qué lo llevó a tomar esa decisión?…

Se desconoce si la autoridad intervino desde el momento en que estaba arriba del mismo puente; lo único que se sabe es no perdió la vida, y que fue traslado a un nosocomio.

En la otra imagen, la que ocurrió en San Pablo del Monte, es desgarrador observar cómo un sujeto intenta agredir violentamente a su novia, y como dos policías forcejean con él.

Realmente, es impactante ver que dos efectivos no pueden someter a dicho sujeto, que termina por dispararle a dicha mujer en una pierna.

Sin duda, es complicado controlar la furia de un sujeto así, fuera de sí.

El mismo video evidencia la falta de capacitación de ambos policías, una falta de habilidad para el manejo de crisis.

Ayer la Comisión Ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad Pública (Cesesp), anunció la asignación de Centros de Control y Comando, mejor conocidos como C2, para los 60 municipios de la entidad.

Informó que 14 municipios ya fueron preseleccionados y serán los primeros en recibir cinco millones de pesos, que serán invertidos en tecnología para reforzar las tareas de seguridad.

Los primeros 14 municipios preseleccionados son: Apizaco, Calpulalpan, Chiautempan, El Carmen Tequexquitla, Huamantla, Ixtacuixtla, Nanacamilpa, Natívitas, San Pablo del Monte, Tenancingo, Tlaxcala capital, Tlaxco, Zacatelco y uno más que está por definirse.

También sería sensato que destinaran recursos económicos, para que elementos sepan actuar en este tipo de casos, en el manejo de crisis.

Un joven se aventó al vacío a menos de dos kilómetros de la base de Bomberos y de la policía, y en la otra dos policías valientes -debo admitirlo- enfrentado a un salvaje.

Aclaro, no es culpa todo de la autoridad, sino también corresponsabilidad de la propia sociedad. ¿Dónde iremos a parar?…

Buen inicio de semana. ¡Nos leemos mañana!

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