18 octubre, 2022
El destape formal por parte de la senadora Beatriz Paredes frente a la militancia priísta en la sede nacional del tricolor generó diversas reacciones en la opinión pública, de cara a las elecciones de 2024.
Me quedo con un par de momentos importantes en el acto de ayer, donde estuvo presente parte de esa crema y nata del priísmo nacional.
El primero es cuando la exgobernadora del estado, dijo que desde su trinchera expresaba con humildad su interés por buscar la silla del águila en 2024.
Solo fue la reafirmación de su propia actuar, de sus dichos y hechos. Ahora frente a los suyos.
El segundo fue cuando ella mencionó que no tenía que ver con ningún grupo de poder, con ningún magnate o bien interese oscuro alguno, que todo ese apoyo tenía que ver con el pueblo de Tlaxcala y con las mismas oportunidades.
Siempre lo sostendré la legisladora que creció en Huamantla y de familia adoptiva en Tizatlán, es una mujer de poder, preparada, audaz y que sabe su oficio como ninguna priísta en el país.
Sin embargo, dejó abierta una pregunta ¿Los tiempos conspiran a favor de Beatriz?…
Me quedo con los comentarios escritos en mis plataformas de comunicación sobre este acto político, todos son interesantes y han generado hasta división de opiniones.
En las reacciones de mujeres y hombres cibernautas unos están de acuerdo, otros se cuestionan -la mayoría jóvenes- si acaso Beatriz realizó un beneficio por Tlaxcala, cuando gobernó.
La cuestionan de todo, y siempre será válido que ustedes tengan la última palabra. Así que veremos a una Beatriz Paredes en acción, veremos de qué correa está hecha.
Por lo pronto, la aspirante lanzó una invitación para formalizar una coalición opositora. ¿Qué responderá PAN, PRD y el propio PRI?…
De ser ella la ungida de esta alianza ¿Le arrebataría a Morena el poder de votos en Tlaxcala y en el resto del país?… Tiempo al tiempo.
¡Nos leemos mañana!…