17 noviembre, 2020
La Senadora de la República por Tlaxcala, Ana Lilia Rivera Rivera, presentó, la semana pasada, ante el pleno de la cámara alta del Congreso de la Unión, la iniciativa que reforma el artículo 279 de la Ley General de Salud, a fin de reducir y prohibir plaguicidas altamente peligrosos para la salud humana y para los ecosistemas.
Lo anterior, tras considerar que el 26 de diciembre del año 2018, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), emitió la recomendación número 82/2018 dirigida a instituciones gubernamentales sanitarias y de medio ambiente, por encontrarlas responsables sobre la violación a los Derechos Humanos, a la alimentación, al agua salubre, a un medio ambiente sano y a la salud, por el incumplimiento de la obligación general de debida diligencia, para restringir el uso de plaguicidas de alta peligrosidad en agravio de la población en general.
La Senadora expuso que el proyecto de decreto propone ordenar y supervisar en coordinación con las dependencias del Ejecutivo Federal competentes, la reducción y prohibición progresiva de los plaguicidas altamente peligrosos, “considerando como criterios aquellos que contienen sustancias tóxicas prohibidas en tratados internacionales de los que México es parte”.
Detalló que la iniciativa plantea elaborar un programa nacional de reducción y prohibición progresiva de registros y permisos sanitarios vigentes de plaguicidas de alta peligrosidad, con la aplicación del principio precautorio, al dar prioridad a los prohibitivos en otros países y los incluidos en los convenios internacionales.
En tribuna del Senado de la República, citó que también es necesario facilitar el registro de plaguicidas de menor peligrosidad, bioquímicos, microbianos y botánicos, a fin de proteger la salud de los campesinos y por la seguridad alimentaria nacional.
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