15 julio, 2019
Permisionarios y choferes del transporte público, hicieron válido su amague de berrinche y decidieron manifestarse este lunes en Palacio de Gobierno de Tlaxcala y, con decenas de unidades vehiculares, bloquearon el primer cuadro de esta ciudad capital en demanda de atención directa por parte de la administración local.
Provenientes de algunas rutas de los cuatro puntos cardinales del Estado, todas afines a los dirigentes del reducido grupo, lo mismo taxis que camionetas y hasta autobuses fueron estacionados alrededor del zócalo capitalino, con decenas de operadores, valiendose de mujeres y hasta personas de la tercera edad y niños, que pidieron que una comisión de sus representantes fuera recibida por el mandatario estatal para exponerle los diferentes puntos que les incomodan e impiden mantener el control absuluto en el gremio.
En específico y como lo plasmaron en pintas en sus unidades, que se ponga un alto a la inseguridad por los robos que han sufrido y que se cancele la posibilidad de que las plataformas tecnológicas de transporte privado funcionen en Tlaxcala, hasta en tanto no estén reguladas por la Ley en la materia.
Incluso, los taxistas que se dijeron los más afectados por la competencia supuestamente desleal, estacionaron sus coches en la explanada del zócalo, como un ultimátum a ser atendidos o de lo contrario permanecer ahí de manera indefinida. En tanto, el tránsito vehicular en el resto de las céntricas calles de la ciudad se vio afectado significativamente.
Los inconformes, entre otras cuestiones, señalaron que las plataformas tecnológicas representan el abuso del poder, puesto que entre mayo y junio el Ejecutivo local determinó emitir tres decretos que prácticamente liberan del transporte público, permitiendo con ello que particulares lucren con el servicio sin cumplir con los derechos y obligaciones, al tiempo de afectar a miles de trabajadores formales del volante y a sus familias.
Alfredo GONZÁLEZ/ Redacción
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