10 enero, 2019
En toda la polémica que apenas han levantado algunos mass-media, en torno a la aprobación del presupuesto de egresos de 2019, y que por cierto sus reporteros jamás estuvieron la madrugada del 29 de diciembre, fecha en que se avaló el mismo
hay mucha información imprecisa.
Aquí lo más importante que los Poderes Ejecutivo y Legislativo, no polaricen más dicho caso, y que haya cordura entre sus representantes, con el objeto de no afectar programas de tipo social, pues de nada servirán posiciones encontradas.
Más allá, de lo que digan erróneamente en la opinión pública, es necesario que alguno de los dos poderes inicie un acercamiento que permita darle claridad a los acciones de gobierno, antes de pensar llevar el presupuesto aprobado a los tribunales.
Y es que es necesario que los políticos del momento, manden una señal de privilegiar el interés por Tlaxcala, más allá de lo que puedan capitalizar para sus fines personales.
Si los diputados locales se extralimitaron -como dice el Ejecutivo Estatal- es hora de que acepten sus propios yerros, y que por ende puedan rectificar lo que para ellos estuvo bien.
Lo cierto, es que de no acceder ambos poderes entonces los perjuicios serán múltiples en la cadena productiva de Tlaxcala. Así es están a tiempo de razonar y enmendar lo necesario.
Insistimos que faltó comunicación antes de la aprobación del presupuesto, pero el diputado local, Milton López Avendaño debe ser honesto e informar qué propuesta hizo al resto de sus correligionarios. ¿No que mucha transparencia?…
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