La señora de las gelatinas 

12 diciembre, 2016

Muchos se preguntan si la senadora de la República, Martha Palafox cometió un exceso al regalar sendas gelatinas a cada una a sus homólogos de la Cámara Alta, y desde nuestro punto de vista podemos decir que si y no. Amables lectores ustedes pensarán ¿o sea cómo?… 

En este espacio de crítica, diremos las razones del por qué sí cometió un exceso. Así de simple, esos 25 mil pesos que pago por todas las gelatinas pudo haber sido destinado para una noble causa, por ejemplo, para los más necesitados en su natal Tlaxcala.

Ella misma conoce las necesidades alimentarias de muchas familias que padecen pobreza extrema y que con su apoyo pudo aminorar el hambre de padecen muchas y muchos ciudadanos de varios rincones de la geografía estatal.

Sin embargo, la folklórica legisladora prefirió mandar a hacer unas gelatinas con el rostro de sus homólogos de cámara, lo que deja entrever su poca imaginación hasta para hacer un detalle para quienes ocupan esta responsabilidad popular.

No nos debe preocupar las acciones de la legisladora porque su vida política pasa de escándalo en escándalo. 

Basta recordar que hace unos días medios de comunicación nacionales evidenciaron que la misma mujer tiene a su hijo como asesor en la Cámara de Senadores, donde gana un salario arriba de cien mil pesos, o sea, gana lo equivalente al gobernador del estado, Mariano González Zarur.

El hecho es que a la senadora por «chiripa» le da lo mismo insultarse con otras legisladoras como sucedió Dolores Padierna -cuando fue senadora- por esta razón no nos debe espantar sus ocurrencias.

Y no hay qué criticarla porque la esencia de la originaria de Huamantla, es la cocina. Si los recuerdos no nos fallan ella era la tamalera del PRI; es decir, para hacer efectivas las movilizaciones políticas ella era la encargada de hacer las tamaladas y por si fuera poco, la misma fémina detalló en su currículum entregado a su ex partido que tomó un curso intensivo de embutidos. 

Así es que entre la fondita que algún día tuvo y un restaurante son la verdadera esencia de su ser, pues en el aspecto de lo político ha sido dos veces legisladora federal por chiripa. No la juzguen mejor comprendan que su pasado va ligado a las cocinas y cucharones.