17 noviembre, 2016
En el primer aniversario del Modulo Dental que se ubica en la comunidad de Santa Anita Huiloac, perteneciente al municipio de Apizaco, el jefe del Ejecutivo Estatal, Mariano González Zarur, sostuvo que esta localidad está transformada y dedicó algunos minutos para explicar el por qué. Empero, también hubo caras y gestos.
En sus últimos días como mandatario estatal y frente a invitados el hombre de la investidura gubernamental detalló las acciones que realizó para darle una mejor imagen a la localidad, dada la importancia que representa su economía y su desarrollo para la entidad tlaxcalteca.
Hasta ahí todo iba viento en popa, y el alcalde panista y propriísta Jorge Luis Vázquez Rodríguez, se sentía vanagloriado de haber contribuido a este logro. Y la portentosa dentadura que lo caracteriza buscaba estallar con una sonrisa que nunca llegó.
En una arenga del titular del Ejecutivo Estatal detalló los logros que tuvo su administración en materia de empleo, de justicia, campo, infraestructura urbana, economía, turismo, desarrollo social, entre otros, rubros prioritarios para las 60 comunas de la entidad.
Sin embargo, Mariano González, no perdió oportunidad para enviarle una indirecta al presidente municipal. Que de poco sirvió transformar algunas avenidas si en pleno día y noche hay un total desorden.
«Un señor me dijo el otro día que vio la calle Cuauhtémoc, y que la misma se ve impactante, pues si pero qué lástima porque algunos ciudadanos en lugar de estacionarse en las bahías que les dejamos se estacionan en batería. Y luego llegan a cargar y descargar, entonces son ya tres espacios que ocupan y dejan un solo carril para que pueda pasar los autos», espetó el mandatario.
Justo en ese momento la expresión del alcalde cambió, quedó sumamente serio y los músculos de su voluminoso rostro se contrajeron. El júbilo quedó fundido y el sin sabor afloró. El gobernador daba a entender que las acciones en materia de vialidad en la ciudad rielera eran un desorden.
Varios de los asistentes se le quedaron mirando y quizás pensando si Vázquez Rodríguez, hizo algo positivo -en tres años- por un municipio sumido en el desorden vial, donde prevalece el ambulantaje, la basura, la inseguridad y los excesos de tipo administrativo.
Además, los colaboradores del munícipe visiblemente se incomodaron ante las palabras de un ex alcalde de Apizaco como es Mariano González Zarur, quien recientemente le dijo a algunos periodistas -en una plática de café- que un presidente municipal debe ser un eficiente conserje de su pueblo para tenerlo limpio, ordenado y con desarrollo.
Y en efecto el aún mandatario estatal tiene toda la razón, pero frente a un político que no tiene visión, que le da lo mismo traicionar que ser leal a sus principios entonces quiere decir que no tiene la voluntad de ordenar a un municipio como Apizaco, para tenga calles y avenidas dignas, una policía eficiente, y mejores servicios urbanos (recolección de basura, agua potable, alumbrado público, entre otros rubros).
Sencillamente, si en las calles prevalece el desorden en sus vialidades, entonces qué pasará en cuestiones de seguridad donde a plena luz del día secuestran, asaltan, y hasta detonan armas por la dispuesta de lugares en la vía pública. ¿Eso es orden?…
Por si fuera poco las mujeres aún caminan con miedo pensando que en las noches hay un demente que las podría atacar, y que en realidad quedó tal figura enigmática como parte de un cuento o mito. El panista fue incapaz para descubrir qué pasó en este capítulo incómodo de su administración.
Y qué decir de los diputados locales que le toleran los excesos al munícipe panista quien tenía la cuenta pública de 2015, con sentido negativo -según el Órgano de Fiscalización Superior (OFS)- y que sorpresivamente le aprobaron la misma. ¿Acaso triunfó la impunidad?…
Aquí vale la pena terminar esta opinión con las siguientes interrogantes: ¿Valió la pena que Adriana Dávila, Orlando Santacruz, Roberto Gil y Ernesto Cordero gritaran en las calles para defender una dudosa elección municipal intermedia?… ¿En verdad se merece el alcalde estar en el próximo gabinete de Marco Mena?..
Lo que sí sabe el pueblo de Apizaco y el Partido Acción Nacional (PAN), es que es un alcalde gris y además desleal. El hombre se mide por sus propias acciones, y Vázquez Rodríguez tan sólo como alcalde y como político, es de los personajes que Tlaxcala y México no necesitan.
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