22 agosto, 2016
Tras permanecer callada desde su derrota del cinco de junio, la ex candidata al gobierno de Tlaxcala, Adriana Dávila Fernández arremetió en contra de varios de sus correligionarios a los que no dudó en tachar de corruptos, simuladores e improductivos, al tiempo que señaló que el proceso electoral estuvo lleno de trampas y tramposos.
Sin dar nombres y apellidos, la apizaquense indicó que algunos panistas han sido evidenciados por sus yerros como Alejandro Aguilar quien tiene problemas con sus hijos, así como las ex diputadas federales -Aurora Aguilar y Leonor Romero- a las que recordó por el escándalo por los “moches” a cambio de gestionarles recursos federales a alcaldes.
Al asistir al primer informe de labores de la diputada federal, Minerva Hernández Ramos, la ex abanderada de Acción Nacional dijo que se mantuvo en silencio después de las elecciones del pasado cinco de junio, por lo que ahora regresará a la actividad pública a Tlaxcala.
Es más crítico nuevamente los actos de corrupción de alcaldes, y la propia improductividad de diputados panistas como José Gilberto Temoltzin; «yo siempre asumí responsabilidad de la campaña y cada quien debe asumir la propia por lo que quien desean mi muerte política, yo les deseo mucha vida para que sean testigos de que me va bien” expresó.
Del mismo modo, rechazó que haya palomeado a la priísta Guadalupe Sánchez Santiago como coordinadora de la bancada de Acción Nacional en la próxima legislatura local, al tiempo de atribuir esa información a “fuego amigo” en su partido. «Prepárense porque voy a participar con todo en la renovación de la presidencia estatal del PAN, por lo que aquellas voces que piden me aleje de ese proceso, se van a quedar con las ganas”, dijo.
En la misma entrevista, argumentó que no tiene información real de que la elección del pasado cinco de junio se vayan anular en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), pero lo que si realmente sé que «estuvo llena de trampas por parte del PRI y PRD… los involucrados vienen de la misma cuna».
Dejó entrever que hubo un rebase en los topes de campaña de los abanderados del tricolor y del sol azteca, Marco Mena Rodríguez y de Lorena Cuéllar Cisneros, sin embargo, no iba a impugnar algo para hacerle el «caldo gordo a la perredista». Sostuvo que a Tlaxcala le avisora un panorama social y político difícil en los próximos meses y años.
Al cuestionarle la actitud entreguista de la actual bancada del PAN hacia el PRI y al gobernador del estado, Mariano González Zarur, evadió la pregunta del reportero, pero señaló que espera que haya una nueva bancada -en la próxima legislatura- que fiscalice verdaderamente los recursos del pueblo.
Incluso, se le cuestionó si está en condiciones de buscar una diputación federal en las elecciones de 2018, por lo que contestó que es todavía muy prematuro, pero lo cierto es que anunció su regreso a la arena política de Tlaxcala.
JC
© 2024 ÍNDICEMEDIA
