¿Hubo debate?…

25 abril, 2016

Sencillamente, no hubo debate, los ocho aspirantes a la gubernatura del estado no convencieron a propios y extraños, ya que sus argumentos fueron más de lo mismo, carentes de argumentos y sin propuestas novedosas que realmente ayuden al progreso de Tlaxcala.

No hubo algún abanderado que ahondara en propuestas concretas y sólo se dedicaron a vanagloriarse y a darse golpes bajos, mientras que la realidad es otra en Tlaxcala. Nos queda claro que los abanderados no están a la altura de las circunstancias cuando sus propuestas ya son existentes en muchos gobiernos emanados del PRI, PAN y PRD. Y como dice la frase célebre del conejito de Cartoon Network, Bugs Bunny ¿Qué hay de nuevo viejo?… 

El majestuoso Teatro Xicohténcatl fue escenario de un encuentro, que si bien contribuyó a la democracia también fue mudo testigo de la guerra mediática que provocó el debate organizado por el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE). En las redes sociales los candidatos se declararon ganadores de este primer debate. Uno se pregunta ¿Lo hubo?…
Los datos duros ahí están, hay organismos serios e instituciones públicas que han revelado la realidad que vive Tlaxcala en materia de seguridad pública y de educación, sin embargo, ninguno de ellos recurrió a las mismas y sólo se dedicaron a presumir lo que han hecho a lo largo de su trayectoria política. ¿Qué de novedoso tiene entregar becas? ¿Qué de nuevo tiene crear un C5? ¿Qué de nuevo tiene crear un observatorio ciudadano? ¿Qué de nuevo tiene instalar techumbres en escuelas? ¿Qué de nuevo tiene entregar vales de papelería?…

Insistimos, los ocho tuvieron la oportunidad de exponer la realidad en ambos puntos que tocaron, sin embargo, el pésimo moderador Salvador García Soto, no supo instar a los participantes a que guardaran respeto. Según, el ITE no habría agresiones y fue lo que más perduró ante la tibieza de un reportero foráneo y desconocido en el mundo periodístico.

Realmente nos debe poner a pensar qué capacidad intelectual y habilidad política deberá tener el próximo mandatario para gobernar cuatro años y ocho meses, pero realmente nos debe preocupar más la actuación tibia de los consejeros electorales. En una hora abordar solamente dos temas es bastante criticable cuando la realidad en Tlaxcala muestra un rostro crítico. 

En materia de educación hay violencia escolar, deserción de alumnos; adiciones a las drogas, tabaco y alcohol, maestros en protesta e incapaces de pasar una evaluación, profesores que cierran carreteras, alumnos muertos; en el rubro de seguridad hay casos de secuestros, ejecuciones, robos en todas sus modalidades, trata de personas, desapariciones. ¿Quién de los ocho ahondó en estos temas?… 

Así de sencillo, el «debate» sólo generó una guerra de porras, desorganización en términos de seguridad, vedetismo de los consejeros electorales, reglas que se rompieron, privilegios para un medio de comunicación impreso y una guerra mediática en redes sociales sin cuartel. 

En el post-debate ¿quién ganará?… Todos se asumen ganadores del «debate»… Insistimos ¿Cuál debate?… Para ser gobernador no sólo es gritar, nonhablar en forma ortodoxa sino tener la habilidad para saber interpretar lo que un pueblo espera, un desarrollo real, sin simulaciones.

Finalmente, de este ejercicio se hizo una parodia del programa televisivo «La Escuelita» con Jorge Ortiz de Pinedo, donde la maestra Canuta no supo controlar a los alumnos y todo terminó en la guasa.