El costo de la mega coalición

23 marzo, 2016

Queda en evidencia que la repartición de candidaturas entre la «mega coalición», le salió demasiado caro al Partido Revolucionario Institucional (PRI), pues tuvo que ceder a la ambición, pero sobre todo hambruna del PVEM, PAN y PS.

El pacto entre los diversos partidos políticos evidencia que el tricolor tuvo que pagar un precio demasiado alto para complacer a sus aliados, por lo que el clamor de los priístas que deseaban ser congratulados se disipó, y ahora solo tiene la esperanza de que serán llamados al gabinete de Marco Antonio Mena, en caso de que gane la gubernatura del estado.

Otro punto que tiene molestos a varios priístas, es que no han sido tomados en cuenta para trabajar coordinadamente con el equipo del propio Mena Rodríguez, lo que hace pensar que solo trabajarán con la «elite» del priísmo y con una estructura alterna desde el gobierno estatal.

Y ese mismo priísmo está sabedor de que deberá participar en la gran movilización para el cinco de junio, sin embargo, hay otro sector de la militancia que simulará y al final de cuentas terminará por apoyar a otro candidato que les ofrezca algo.

Por ello, surge la interrogante ¿qué tanto habrán aprendido los priístas de las elecciones de 1998? ¿qué tanto aprendieron de ser oposición por doce años?…

Insistimos que el PRI pagó demasiado caro el precio, y que en nada le garantiza que su operación sea eficaz mediante este tipo de acuerdos, por lo que ahora resta esperar al cinco de junio. Y también nos preguntamos ¿cuántos priístas están felices y contentos?…

Lo que sí sabemos, es que Guadalupe Sánchez Santiago, Federico Barbosa Gutiérrez, Aurora Villeda Temoltzin, entre otros, emigraron, precisamente, por no ser escuchados menos ungidos, y que ahora buscan nuevos horizontes, ya lejos del PRI como sucedió con Alfonso Sánchez Anaya, Héctor Ortiz Ortiz, Lorena Cuéllar Cisneros y muchos más.