29 enero, 2016
En un hecho inédito, el presidente del CEN del PRD, Agustín Basave Benitez, le ofrece a su candidata a la gubernatura de Tlaxcala, Lorena Cuéllar, “ser su jefe de campaña”.
Resulta muy llamativo este asunto. Y, sin embargo, es muy ilustrativo para entender que Tlaxcala, a nivel nacional, sigue considerado como laboratorio electoral para el país.
La clave para entender el punto está en una frase dicho por Basave, durante una conferencia de medios: Tlaxcala será un estado prioritario para el PRD.
O Basave cree que los tlaxcaltecas somos ignorantes, o el ignorante es él.
¿Qué puede representar para un partido a nivel nacional una entidad que apenas significa el 1% del padrón electoral, como para considerarlo “prioritario”?
La importancia radica en un hecho nimio, pero revelador. Tlaxcala es la primera entidad en la que habrá mayoría de mujeres como candidatas al gobierno del estado.
Repasemos hasta el momento la lista de aspirantes. Por Acción Nacional es casi un hecho que abandere Adriana Dávila Fernández.
Desde la trinchera perredista ya está firme Lorena Cuéllar Cisneros. Mientras que por Morena, es inamovible Martha Palafox Gutiérrez.
En el PRI (junto con sus aliados) estará Marco Antonio Mena Rodríguez y Serafín Ortiz Ortiz cuidará los intereses del partido local Alianza Ciudadana.
Con este escenario, viejo lobo de mar, Basave Benitez tratará de ver, desde primera fila, una elección con estas características.
Y no será para replicar formulas en otras entidades únicamente, sino, sobre todo, para planear una eventual lucha femenina en la carrera por la Presidencia de la República.
No olvidemos que, hasta el momento, se vislumbran dos posibles candidaturas femeninas por el cargo más elevado de la nación: Margarita Zavala y Rosario Robles.
Y más que Tlaxcala como prioridad, se antoja un experimento para pulsar el ánimo de los electores en una contienda dominada por mujeres.