27 julio, 2015
Desde la REDACCIÓN
El mensaje del presidente de la República, Enrique Peña Nieto, fue claro en el pasado Consejo Nacional del PRI, para todos aquellos priístas “trapecistas” que sólo desean saciar sus instintos en los cargos de elección popular.
Ojalá, algunos diputados locales y alcaldes entiendan que primero está el interés por México, por Tlaxcala antes que buscar otro espacio popular, pues queda en evidencia que su hambruna es mucha, ya que les gustó vivir del erario.
Está claro que Peña Nieto, lo dijo para todos aquellos que políticos que dentro y fuera del PRI, buscan la presidencia de la República, pero ojalá los militantes sedientos de poder entiendan que primero deben cumplir con su encomienda.
Por ejemplo, en la bancada del PRI, prácticamente, ocho de nueve integrantes buscarán ser los ungidos como candidatos a las presidencias municipales y uno para la gubernatura del estado.
Mientras que en el caso de los alcaldes priístas intentan hacer lo mismo, pues saben que podrían pasar cuatro años y ocho meses en la congeladora, en caso de que su partido no lograra ganar la primera magistratura del estado.
Lo cierto, es que mientras el gobernador del estado, Mariano González Zarur, le da juego a algunos militantes para que puedan aspirar a sus sucesores, el presidente Peña Nieto manda otro mensaje político a sus colegas.
Dentro del mensaje subliminal, el mexiquense les dijo a los suspirantes y gobernadores que quien manda en el PRI, es él. Sus palabras fueron contundentes y que nadie se equivoque porque de hacerlo no saldrá en la fotografía.
El líder moral de los priístas fue contundente: «no hay espacios para proyectos personales, hoy es momento de un proyecto de nación». ¿Los trapecistas del PRI qué opinan? ¿Dónde queda su proyecto por Tlaxcala?…
Y es que quienes palpamos la política todos los días vemos como en el Congreso del Estado, hay diputados del PRI y del resto de las fracciones carentes de liderazgo y desde luego, pobres dentro de su trabajo legislativo.
Lo mismo ocurre en los municipios cuya crisis la padecen los habitantes con gobernantes populistas y carentes de visión para poder sacar adelante a sus respectivas comunas un caso especifico el alcalde de Nativitas, Cuauhtémoc Barranco Palacio.
El presidente Enrique Peña Nieto advirtió sobre lo que llamó “la sombra del populismo y la demagogia”, y si supiera que en su partido político en Tlaxcala, prevalece precisamente el populismo y la demagogia por parte de algunos actores que ahora desean gobernar el estado.
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