La ruta de los “Maras”

26 mayo, 2013

*Su presencia está en 24 estados, entre ellos, Tlaxcala

* Un estudio de la CNDH, alerta sobre este fenómeno

* La OEA, dice que las “clicas” son potencialmente violentos

Primera de dos partes

Por JAVIER CONDE

Pese a que el gobierno estatal, no ha alertado a la población sobre la presencia de “maras” en territorio tlaxcalteca, las autoridades federales han revelado que en 24 entidades, entre ellas, nuestro estado hay integrantes de la MS-13, cuya evidencia principal es que cometen todo tipo de delitos y asumen una actitud de total rebeldía contra de sus paisanos.

De acuerdo con un estudio que realizó el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) y que difundió la propia CNDH, -y que obra en poder de este semanario- detalla a fondo las áreas críticas potenciales, así como puntos de mayor incidencia de los integrantes de esta pandilla y que la mayoría de ellos tiene instintos criminales.

El documento al cual tuvo acceso INDICEMEDIA precisa las conductas antisociales que han detectado las autoridades con respecto a los “maras”. El CISEN considera que la autoridad tiene que trabajar en aspectos fundamentales de seguridad pública y de seguridad nacional.

Es más, este organismo de inteligencia dependiente del gobierno federal, no descarta el surgimiento de una nueva corriente afiliada al pandillerismo centroamericano, como es el caso de los “maras mexicanos”.

Una publicación del periódico El Universal, con fecha ocho de abril de 2008, corrobora lo anterior. Detalla en dicho trabajo periodístico que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) alerta sobre el incremento de “maras” en México.

El exombusdman nacional, José Luis Soberanes cita que desde 1996, la presencia de dichas pandillas se ubicaba sólo en Chiapas, pero ahora han logrado penetrar en 24 estados de la República Mexicana, incluyendo el Distrito Federal.

En el informe especial de la CNDH -al cual tuvo acceso este semanario- detalla que la presencia de las denominadas “Mara Salvatrucha MS-13” y “Barrio 18” en los estados de Aguascalientes, Estado de México, San Luis Potosí, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Morelos, Chiapas, Jalisco, Veracruz, entre otros.

La investigación elaborada por la comisión establece el mapa de influencia los “maras” en la frontera sur del país; las principales zonas de concentración de los pandilleros como Chiapas, Tabasco y Quintana Roo.

Además, un mapa elaborado en el año de 2005 por el CISEN, a través de su área de inteligencia migratoria aparece el nombre de Tlaxcala, por lo que precisa que es común que estén asociados con otras pandillas juveniles mexicanas.

Pandillas juveniles

Por su parte, un estudio realizado por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) en colaboración con la Fundación Ford y Kellogg denominado “Pandillas Juveniles Transnacionales en Centroamérica, México y los Estados Unidos hablan sobre la necesidad de analizar a fondo el comportamiento de dichos jóvenes para darse cuenta su potencial de peligrosidad.

Citan que en Tijuana, Morelia y Tapachula efectuaron un estudio donde comprobaron una alta actividad de pandillas juveniles mexicanas, con niveles considerables de violencia y uso de drogas, pero no de “maras”, lo que permite suponer que éstas mismas no han dejado que los centroamericanos se instauren en la República.

Es más, la Organización de Estados Americanos (OEA) revela que en México los “maras” se detectaron a partir de la década de los 90, donde cobraron relevancia en virtud de las prácticas delincuenciales asociadas a ella, además del creciente número de miembros que ingresan diariamente.

En 2001, se estimó -dice la OEA- la presencia de 200 clicas de la “mara” en la frontera sur del país, con cerca de tres mil integrantes; tres años más tarde, aumentó a cinco mil mareros concentrados primordialmente en Chiapas, quienes también han logrado expandirse mediante tránsito a Aguascalientes, Oaxaca, Guerrero, Veracruz, Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, entre otros.

Además, explica que se valoró que en comparación con los años referidos, en el periodo de 2007-2009, el fenómeno “mara” ha disminuido considerablemente, no obstante, su peligrosidad se ha potencializado por su vinculación con organizaciones del crimen organizado.

En un documento denominado “Pandillas Delictivas” que fue entregado por la Procuraduría General de la República (PGR) a la OEA al cual tuvo acceso INDICEMEDIA explica que la principal vía de introducción de los pandilleros a territorio nacional son la vía ferroviaria quienes a su paso han provocado robos, asaltos, violaciones y secuestros, según esta organización.

Asimismo, en esta información considerada como clasificada precisa la forma en cómo operan, los principales lugares donde están incrustados, los nexos con la mafia del narcotráfico. Este análisis fue entregado a la OEA, el pasado 28 de diciembre en el cual hace un profundo estudio de este fenómeno.

Macro operativo

Testimonios periodísticos revelan que en un hecho sin precedente en México, en marzo de 2004 se efectuó un macro operativo, durante los días 25 y 26 de marzo en los estados de Hidalgo, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Tlaxcala, Veracruz y Chiapas, donde se logró la captura de maras quienes fueron remitidos a la PGR.

Incluso, la Secretaría de Gobernación informó un día después de este operativo, de los resultados que arrojó el mismo donde se aseguraron a 899 ilegales, de éstos once eran Maras. En Tlaxcala, se logró el aseguramiento en dicho operativo de 97 centroamericanos, pero ninguno de ellos relacionado con los “maras”.