18 junio, 2012
Desde la REDACCIÓN
En el PRI, se activó la alarma por el rápido crecimiento que ha tenido el candidato presidencial de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, en varios municipios de la entidad, por lo que los priístas iniciaron con el diseño de nuevas estrategias.
En este sentido, la dirigencia estatal y la Coordinación de Enrique Peña Nieto comenzaron a golpear la estructura del sol azteca y prueba de ello, es la adhesión de perredistas vinculados con el exgobernador Alfonso Sánchez Anaya.
La inclusión de Lauro Sánchez Sánchez, extitular del Instituto Tlaxcalteca de la Juventud, de Gabriel Montiel Hernández, exjefe de Logística en el sexenio de Sánchez Anaya, entre otros, viene a reforzar la hipótesis de que buscarán debilitar al PRD.
Y es que el coordinador de la campaña de Peña Nieto, Mariano González Aguirre sabe que el efecto rumor derivado de las encuestas publicadas -amañadas o no- ha generado un efecto positivo para el candidato de las izquierdas.
Por ello, la estructura priísta trata de hacer amarres de última hora con militantes perredistas y panistas que se están sumando en la recta final de las campañas. El propósito es incidir mediática y electoralmente entre los votantes.
Asimismo, las encuestas internas que tiene González Aguirre contienen cifras muy parejas entre Peña Nieto y López Obrador, por lo que el hijo del gobernador tiene una prueba de fuego.
Bajo este escenario, los propios priístas están sabedores de la guerra sucia que se orquestará en su contra aumentará por parte de sus adversarios políticos quienes han comenzado a denunciar sobre el supuesto dispendio de recursos a favor del PRI.
Así que el telón político-electoral para el Revolucionario Institucional, es adverso en la recta final de las campañas porque también saben que el “efecto peje” podría favorecer a candidatos de la alianza PRD-PT y Movimiento Ciudadano.
Candidato sobrado…
En el mismo PRI tienen reportes de que el candidato del distrito 03, Emilio Minor Molina ha emprendido una racha de dejar plantados a seguidores suyos.
Dicen que ya son varias reuniones a las que no llega por el simple hecho de que no dialogará con un grupo minoritario de personas. ¿Así quiere ganar el priísta?…
Una recomendación, que se ponga a trabajar al igual que su equipo de campaña porque la contienda parece estar muy cerrada.