22 abril, 2012
Escribe CLAUDIO CIRIO ROMERO
Los derechos de Acceso a la Información Pública (DAIP) y a la Protección de los Datos Personales (DPDP) son derechos humanos, no ciudadanos. Por lo tanto los niños son beneficiarios de los mismos, aunque debemos reconocer que lamentablemente no hacemos mucho porque así sea.
En nuestra hipócrita vida adulta es fácil olvidarlos. El día del niño, o sea el 30 de abril en México, muchas veces corre con la suerte de festejos pueriles y hasta con fines partidistas.
Para desmarcarnos de esa nefasta cultura es que nos parece pertinente recordar que el 20 de noviembre de 1959 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó por unanimidad La declaración de los Derechos del Niño. En cuyo quinto considerando dice que “La humanidad debe al niño lo mejor que puede darle.”
Asimismo el 29 de mayo de 2000 se publicó en el Diario Oficial de la Federación La Ley Para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y adolescentes, cuyo artículo 3 ordena que dicha protección “tiene como objetivo asegurarles un desarrollo pleno e integral, lo que implica la oportunidad de formarse física, mental, emocional, social y moralmente en condiciones de igualdad.”
Particularmente a quien esto escribe le ha preocupado (cosa que desde luego no ha considerado que deba demostrarlo más que a sí mismo), desde todos los ámbitos personales y profesionales, que poco se haga respecto a lo que señalan dichos ordenamientos.
Por eso es que desde el año pasado propuso al pleno de la Comisión de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de Tlaxcala (CAIPTLAX), dirigirnos a ese espectro social, a través de una obra de teatro denominada “Burbujas de la transparencia”.
Obra que gracias al talento de Rogelio Paredes y su Compañía Teatral ¿Por qué? celebra su Primera Temporada 2012 del 18 de abril al 7 de mayo. Que en las tres presentaciones de inicio han mostrado que estamos en el camino correcto. El entusiasmo de los niños, que se desborda por el carácter interactivo de la puesta; y su involucramiento en la historia ha sido la constante.
Iniciamos en el Instituto Libertad de Zacatelco y en la primaria del mismo lugar Antonino González Abascal. Escuelas que personalmente me representan mucho ya que en la segunda estudié mi nivel básico y en la primera inicié mi labor como profesor, aunque en el bachillerato. Me tomo el atrevimiento de agradecer a sus directivos desde aquí, a nombre propio, el de la Comisionada Presidente Mayra Romero Gaytán y del Comisionado Miguel Ángel Carro Aguirre por el apoyo recibido.
Continuamos el viernes pasado en la Primaria Sor Juana Inés de la Cruz del municipio de Tzompantepec, dónde no sólo los directivos de la misma sino la Presidenta Municipal, nuestra amiga Lorena Vázquez estuvo presente para inaugurar el evento. Le agradecemos también, así como al Secretario del Ayuntamiento Claudio Bonilla y la encargada del Área Responsable de Información Carmen Morales (que por cierto nos ha mostrado un magnífico cuadernillo con el que divulga su labor y por lo que la felicitamos, así como a quién lo elaboró) que estuvieron atentos durante la obra.
El lunes 23 estaremos en la Primaria Fausto Vega Santander del municipio de Muñoz de Domingo Arenas, luego el 2 de mayo en la Universidad Metropolitana de Tlaxcala y cerraremos el 7 de mayo en el Teatro Universitario de la UAT.
La obra busca y logra divulgar con una increíble amenidad, lo que la Ley mencionada antes dice en su artículo 38 del derecho a participar, ya que “Niñas, niños y adolecentes tienen derecho a la libertad de expresión; la cual incluye sus opiniones y ser informado (negritas y cursivas nuestras).”
El DAIP y el DPDP se muestran con la claridad de una burbuja de jabón, que se ve en la entrega de los actores y sus personajes entre los que destaca Súper DAIP como el héroe que lucha por la transparencia. Por cierto respecto al DPDP tenemos en el Memorándum de Montevideo http://www.iijusticia.org/Memo.htm un referente importante.
Valga mediante esta Palabra en transparencia, recordar también que el Principio 7 de la Declaración mencionada arriba dice sin rodeos que “El niño debe disfrutar plenamente de juegos y recreaciones, los cuales deberán estar orientados hacia los fines perseguidos por la educación; la sociedad y las autoridades públicas se esforzarán por promover el goce de este derecho”.
Y también en eso trabajamos en la CAIPTLAX.
ccirior@caip-tlax.org.mx twiter: @ccirior