14 marzo, 2012
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El exdiputado local del PAN, José Gilberto Temoltzin Martínez, quien fue detenido en días pasados por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), reveló que teme por su vida, luego de ser perseguido por ciertos funcionarios del actual gobierno estatal.
En un desplegado que publicó en el diario El Sol de Tlaxcala el empresario indicó que teme por su integridad física y sostuvo que él no es ningún delincuente y a través de ese escrito pide la intervención del presidente de la República, Felipe Calderón.
Y desde luego del gobernador, Mariano González Zarur, así como de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Raúl Plascencia Villanueva, para que intervengan a fin de sancionar las irregularidades cometidas en su contra.
El político dijo que a lo largo de su vida ha tenido diferencias e incluso a familiares en diversos grados, pues se puede leer: “José Gilberto Temoltzin Martínez no es ningún delincuente, que todos y cada uno de los bienes que forman parte de mi patrimonio”.
Agregó que jamás “me he dedicado al robo de vehículos, ni tampoco me dedico al tráfico de mercancía robada, ni mucho menos he tenido en el interior de mis propiedades tracto camiones asaltados y sorprendidos con diversas mercancías robadas, ni mucho menos delincuente de género por violencia intrafamiliar”.
Agregó “ los bienes propiedad de la empresa La Luz SA de CV han sido obtenidos legalmente y tengo la información que así lo acredita. Demostrando con ello que no soy un descendiente abusivo ni malagradecido”.
Temoltzin Martínez precisó las vejaciones de la que fue víctima, junto con su hijo menor, cuando fue detenido el pasado 4 de Marzo por policías ministeriales, a quienes en un principio consideró como integrantes de un grupo delincuencial armado.
Añadió que lo encañonaron y nunca se identificaron hasta que fue trasladado a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
El ex diputado local panista, también da cuenta de las irregularidades con que actúo el juez primero penal del Distrito Judicial de Guridi y Alcocer, Raúl Baizabal Aguirre, quien dictó la orden de aprehensión sin estar en ejercicio legal.
Finalmente, sentenció “lo que pone en evidencia el tráfico de influencias y el contubernio de las autoridades involucradas con la intención de perjudicarlo, incluso calificó su detención como “una operación de inteligencia de estado”.