05 septiembre, 2011
Por la REDACCIÓN
Un hombre que sí cumple su palabra, así define Pioquinto Santa Cruz Cervantes al Gobernador Mariano González Zarur, quien -contundente como es- termina un mensaje dirigido a los pobladores de Panotla en su visita de trabajo por esa zona, donde ofrece gobernar para la mayoría con un proyecto de trabajo integral para sacar a Tlaxcala del atraso en el que se encuentra.
Estas palabras llegan al corazón de Don Pioquinto, un anciano con la cara curtida por el sol, quien no duda en decir -a grito pelado-: “¡estamos contigo, Mariano!”.
“Tú si cumples, no como los presidentes municipales, como el que se fue con nuestro dinero, con nuestras esperanzas. ¡Te lo digo aquí, de frente!… Qué bueno que regresas, que nos animes a trabajar”, suelta ante la sorpresa de propios y extraños.
El coordinador de los esfuerzos de los tlaxcaltecas escucha cada una de las palabras pronunciadas por Pioquinto con atención y humildad porque sabe que, en el fondo, ese es el verdadero sentir de la gente.
El ciudadano no espera nada más, con su folder bajo el brazo y su sombrero de palma prefiere buscar la sombra de un árbol, al fin que ya cumplió al decir algo que nunca antes le habían permitido.
La visita a Panotla, una fiesta
La gente de Panotla está de fiesta y la música de banda de viento alegra el momento. Los cohetones y entusiasmo y algarabía de las mujeres de la tercera edad se confunden a la llegada del mandatario Mariano González Zarur, quien escucha cada una de las demandas ciudadanas.
Qué si el rescate de un terreno, que si la construcción de la Casa del Abuelo o que la planta de tratamiento…
Sí, a eso y más habrá respuesta, ataja el jefe del Ejecutivo.
Eso sí, aclara que todo será posible, sólo con la participación de todos, con un trabajo conjunto, donde los ciudadanos participen y hagan faena.
Al fondo, un grupo de jóvenes porristas demuestran su afecto al Gobernador: ¡Mariano, amigo, Panotla está contigo!
La gira de trabajo es larga, por eso González Zarur aprieta el paso, le esperan todavía más comunidades, y habrá de visitar todas este año.
El jefe del Ejecutivo encabeza la caravana que se enfila a las entrañas de cerros y cañadas. Llega a la parte más alta del municipio de Panotla, en Santa Catalina Apatlahco, donde nunca antes un Gobernador había estado.
Por eso los lugareños agradecen que Mariano González Zarur se preocupe por conocer sus problemas, así que aprovechan su estancia en ese lugar y exponen su principal preocupación: la mala calidad del agua.
En corto, y tras una rápida consulta con Aldo Lima, el director de la Comisión Estatal del Agua, el jefe del Ejecutivo expone que la solución es un tratamiento de filtración del líquido antes de mandarlo a las casas, proyecto en el que –ofrece- trabajará su gobierno.
“Sabíamos que podemos contar con usted”, responde una mujer de cabeza cana que escucha esta alternativa como una forma de atender su problemática.
Otro mensaje de aliento, esperanza y motivación se repite en San Mateo Huiloapan. Ahí el Gobernador anuncia que su administración buscará operar 108 plantas de tratamiento que no funcionan, con la intención de mejorar la calidad de vida de todos los tlaxcaltecas y aminorar la contaminación del Zahuapan.
Luego, ya en los Reyes Quiahuixtlán, del municipio de Totolac, Rosa Aurora Espejel detiene el paso del mandatario para mostrarle una fotografía del entonces Gobernador Tulio Hernández Gómez.
En la imagen se observa a González Zarur en primer plano. Con la foto entre sus manos, el Gobernador escucha el relato de la mujer: “mi papacito fue alcalde de Nanacamilpa, ya murió, hace años, y lo estimaba mucho a usted, mucho, por eso guardo su foto”.
Teponaxtles y lluvia en Chimalpa
Tres teponaxtles retumban en La Trinidad Chimalpa, donde la lluvia hace ese círculo humano más estrecho. La cercanía de los miembros del gabinete estatal con la gente es más real.
En este lugar el jefe del Ejecutivo refrenda el compromiso de solidaridad con este pueblo.
La lluvia arrecia justo al llegar a la escuela “Xicohténcatl”, la cual fue remodelada dentro del programa “Mano a mano, la escuela mejorando”. La tormenta no detiene al Gobernador, tampoco a sus funcionarios.
“Nada de esto hubiera sido posible sin la colaboración de todos”, expone casi empapado el Gobernador, quien –incansable- se dirige ahora a la colonia Zaragoza el último punto de esta gira de trabajo, donde los habitantes coinciden en que en Tlaxcala gobierna un hombre de palabra, que –sin duda- restaurará el tejido social.