05 septiembre, 2011
*La Ley para la Prevención de la Trata de Personas para el Estado de Tlaxcala, no se cumple…
Por JAVIER CONDE
El director del Centro Fray Julián Garcés, Emilio Muñoz Berruecos, sostiene que la Ley para la Prevención de la Trata de Personas para el Estado de Tlaxcala, no se cumple a cabalidad y se corre el riesgo de que sea una “ley a letra muerta” y preocupa que los lenones utilicen nuevos métodos para traficar mujeres.
No obstante, dice que es positiva la iniciativa que tomó el diputado local, Alejandro Aguilar López al presentar una propuesta al seno del Congreso del Estado, para crear la Ley de Extinción de Dominio a fin de atacar la estructura financiera de quienes se dedican a esta actividad ilícita.
En entrevista Muñoz Berruecos señala que ha sido positivo el esfuerzo que ha realizado el gobierno de Mariano González Zarur, para combatir este mal social que aqueja a la entidad tlaxcalteca, no obstante, agregó que los operativos interinstitucionales poco han servido para atrapar lenones y recuperar a víctimas.
Insiste que hay puntos básicos de la Ley de Prevención de la Trata de Personas, toda vez que aún no existe un refugio para la atención de víctimas tal y como lo prevé la normatividad, por lo que es necesario que haya un cabal cumplimiento, toda vez que a las víctimas se les deja a la deriva y no se les da protección ni atención sicológica.
Además, comenta que durante el año 2003, el Centro Fray Julián Garcés desarrolló la investigación sobre la trata de personas para la prostitución a partir de las diversas consideraciones que sobre el fenómeno se fueron señalando en la documentación de casos y testimonios.
Lo anterior, fueron relatados por miembros de los comités de derechos humanos, familias en lo particular y otros informantes de las comunidades del sur del estado de Tlaxcala, subraya.
Para ello, explica se distinguió de manera inicial el fenómeno conforme se presentaba en el interés de los participantes de la pastoral de los derechos humanos, quienes participaron en el diseño de la investigación y en la recopilación de la información.
Agrega que la preocupación por las mujeres que ejercen la prostitución se da en locales, bares o en la vía pública, particularmente, las ubicadas en las ciudades o en los ramales carreteros de Puebla a Tlaxcala, o de Apizaco a Calpulalpan.
Asimismo, precisa la localización de los lugares donde se presenta la existencia de un gran número de proxenetas, familias enteras dedicadas y organizadas para el ejercicio de la explotación sexual de mujeres, que obtienen grandes ganancias y que hacen transacciones simbólicas con los habitantes de sus comunidades.
Lo anterior, añade para la “normalización” de la actividad entre los jóvenes y la “tolerancia comunitaria”. Critica que en Tlaxcala, ningún detenido por tráfico de personas ha sido sentenciado, lo que representa una pobreza en materia de justicia, porque este tipo de delincuentes sigue libre.
Indica que dentro de estas investigaciones hay casos concretos de mujeres desaparecidas, o de denuncias en las que se presume la explotación sexual de las mujeres en otros estados de la república o en ciudades de Estados Unidos, que a su vez están temerosas de hacer una denuncia formal ante las autoridades.
En el mismo estudio que realizó dicha organización –explicó- está la existencia de casos concretos de denuncias jurídicas en las que el ministerio público indica la imposibilidad de procesar la averiguación previa porque el delito procesable (lenocinio) no se cometió en el estado, subraya.
Asimismo, externa que ni se puede comprobar en flagrancia, salvo en los casos en los que se hacen operativos policíacos y se detienen a las prostitutas y a los lenones. “Esto rara vez ocurre porque los proxenetas no suelen estar cerca de las muchachas que prostituyen mientras éstas ejercen la prostitución”.
Además, está la identificación de diversas ofertas de servicios sexuales, desde las mujeres que lo ejercen en la vía pública, en servicios de masajes, en anuncios de periódicos, pasando por el ejercicio de la prostitución en bares y cantinas, hasta los “table dance”, deduce.
Y desde luego, apunta que hay lugares anunciados como VIP para clientes distinguidos, tanto en Puebla como en Tlaxcala. Agrega que existes testimonios en los cuales se revela que dentro de algunos cabildos hay funcionarios municipales ligados a las bandas de tratantes de personas, por lo que es necesario combatir este delito.
Las estadísticas
Dicha organización revela que de 2006 a 2008, se presentaron 57 denuncias, de las cuales 17 fueron actas circunstancias y 40 averiguaciones previas, no obstante, el presidente de esta organización sostuvo que hasta el momento no hay personas sentenciadas dentro del estado de Tlaxcala, por este delito.
Sólo -revela- en el Distrito Federal se han sentenciado a algunos traficantes de personas a 37 años de presión. Agregó que es lamentable que no haya personas acusadas por este delito y pidió a las autoridades a integrar bien los expedientes para que en el terreno de la aplicación de la justicia se castiguen a los culpables.
De acuerdo con las estadísticas de la organización el 46 por ciento de las víctimas eran menores de edad y 54 por ciento mayores de edad, mientras que el 90 por ciento tiene algún grado de escolaridad. Las mujeres que denunciaron son originarias de Chiautempan, San Pablo del Monte, Zacatelco, Contla y Axocomanitla.
Y desde luego mujeres provenientes de los estados de Tabasco, Veracruz, Puebla, Chiapas y Guerrero. “El delito se consumó principalmente Tlaxcala, Puebla, Distrito Federal, Baja California, Chihuahua, Morelos y los Estados Unidos.
Recuerda que desde el año pasado ya se comentaba la posibilidad de crear dicha ley, por lo que confió que el Congreso local tome en cuenta la solicitud del legislador panista y sea aprobada; sin embargo, “ante todo que no quede como una norma muerta, esa es la preocupación que tenemos”.
Puso como ejemplo la ley para combatir la trata de personas en la entidad, la cual no ha se ha aplicado en todos sus aspectos, no obstante que la entidad es señalada como uno de los principales puntos del país donde existe el problema.
“Lo que nosotros decimos es qué bueno que se esté subiendo, pero hay que cuidar que tenga los elementos fundamentales que permitan verdaderamente extinguir lugares que hayan sido utilizados por la delincuencia organizada. Es una ley que urge, pero sí se debe cuidar que no sea una ley muerta”, insiste.
Nuevas sugerencias
Muñoz Berruecos asevera que en este caso el Centro Fray Julián Garcés –presentó propuestas para la creación de la ley contra la trata– no hará sugerencias para crear la Ley de Extinción de Dominio, “ahora nosotros estamos esperando que ellos suban los instrumentos, como sociedad civil estamos nada más mirando la disposición de estrategia contra la trata de personas, que sigue sin ser aprobada”.
Comenta que si el Congreso local aprueba esa norma “y si es una buena ley tendría posibilidad en dos sentidos por lo menos, uno para extinguir lugares de explotación y otro extinguir lugares que sean producto de explotación sexual.
Es decir, subraya todas aquellas casas que se han construido producto de la explotación sexual o casas donde se hayan acogido a mujeres para su explotación sexual. La ley tendría que tener mecanismos claros de cómo extinguirlos”.
Apunta que es del dominio común la existencia de tratantes o de casas donde se explotan sexualmente a mujeres, “a nivel municipal también es del conocimiento de las autoridades”.
Finalmente, dice que es obvio ver en ciertas comunidades donde difícilmente la gente puede explicar tal riqueza con un trabajo y un salario como el que tenemos en Tlaxcala. Sería un verdadero mensaje contra la delincuencia esta ley”.