22 agosto, 2011
*Un total de 3 mil 833 jóvenes no tienen actividad productiva alguna en el estado.
Por JAVIER CONDE
Por lo menos 3 mil 833 jóvenes en el estado de Tlaxcala, no estudian, ni realizan alguna actividad productiva mucho menos realiza alguna actividad dentro de su comunidad, por lo que ha pasado a formar el universo de Ninis y esta situación le preocupa al gobierno porque representan una carga para sus padres.
Un estudio del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe) revela que en el Estado de Tlaxcala, la población de 14 años en adelante es de 837 mil 546 habitantes, todos estos tlaxcaltecas son de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo los autorizados para realizar una actividad productiva.
La población femenina supera significativamente a la población masculina. Los jóvenes de 14 a 29 años de edad representan el 40 por ciento de la población total del Estado, siendo un total de 326 mil 994, refiere.
Estadísticas del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) revelan que 97 mil 504 jóvenes estudian, 65 mil 512 realizan alguna labor doméstica y sólo 91 algún servicio gratuito a la comunidad
No obstante, es urgente combatir el incremento de la tasa de desocupación abierta de los jóvenes, es decir, el porcentaje de población entre 15 y 24 años que, sin estar ocupada, ha buscado incorporarse a alguna actividad económica.
“Podemos considerar como ninis aquellos jóvenes que declaran no realizar ninguna actividad. Ellos pertenecen a la Población No Económicamente Activa, no realizan algún tipo de estudios, ni aportan servicios a la comunidad. En estas condiciones se encuentra un total de 3, 833 jóvenes”.
A través del Programa “Instructores Comunitarios”, el CONAFE, ofrece a los jóvenes que “ni estudian ni trabajan” una oportunidad de desarrollo, para que realicen un servicio social educativo en alguna de las 198 comunidades de bajo desarrollo social que atiene el Organismo, ubicadas en 45 municipios del estado.
Según , el Conafe la convocatoria se realizó del 16 de marzo al 15 de abril de 2011, destinada a jóvenes entre 15 y 29 años de edad para que atendieran las necesidades de educación de alrededor de 4 mil 500 alumnos de preescolar, primaria y secundaria, que viven en comunidades de alto y muy alto rezago social.
Este universo de jóvenes no tiene acceso a los programas educativos de la Secretaria de Educación Pública (SEP). De esta convocatoria se captaron a 712 jóvenes de entre 15 a 29 años de edad de los cuales fueron seleccionados 431.
Una encuesta aplicada a 431 jóvenes de las regiones Tlaxco, Huamantla y Tlaxcala que ingresaron a las filas del CONAFE, para incorporarse como Instructores Comunitarios, de los cuales 293 son mujeres y 138 hombres.
De un total de 431 jóvenes de entre 15 a 29 años de edad, un total de 113 no realizaban alguna actividad laboral o académica de los cuales 43 son hombres y 70 mujeres y los municipios con mayor número de jóvenes inactivos fueron: Tlaxcala, Huamantla, Altzayanca, Cuapiaxtla, Apizaco, Tlaxco.
Así como San Pablo Apetatitlán, Contla de Juan Cuamatzi, El Carmen Tequexquitla, Santa Cruz Tlaxcala, Nativitas, Coaxomulco, principalmente, por lo que este tipo de programas gubernamentales busca abatir este fenómeno que preocupa.
Y es que este fenómeno preocupa a las autoridades y a los propios padres de familia, ya que para los jóvenes significa una moda. Hay decenas de portales de internet que alientan este tipo de prácticas mal enfocadas donde promueven que no se debe trabajar ni estudiar.
El contexto nacional
Poco más de cuatro de cada diez jóvenes realiza alguna actividad económica de manera exclusiva. Casi cuatro de cada diez tienen como única ocupación estudiar
Uno de cada seis jóvenes se dedica al trabajo doméstico y dos de cada cien trabajan y estudian.
Se utiliza el término “NINI” para hacer referencia al sector juvenil de la población que declara no estudiar ni trabajar. Esta situación se considera problemática, pues se espera que los jóvenes se dediquen a una u otra actividad, en función de la etapa del curso de vida por la que transitan.
La situación de los NINI es considerada por algunos especialistas como un problema de exclusión social, pues las instituciones tienen dificultades para acercar a todos los jóvenes las oportunidades de desarrollo que derivan en la acumulación de capital humano.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) 2009 (II trimestre) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), poco más de cuatro de cada diez personas jóvenes (entre 15 y 24 años de edad) realizaban alguna actividad económica de manera exclusiva.
Casi cuatro de cada diez tenían como única ocupación estudiar, una de cada seis se dedicaba al trabajo doméstico y dos de cada cien trabajaban y estudiaban.
La misma fuente reporta que en México, 1.4 por ciento de la población joven no estudia ni trabaja, proporción que equivale a cerca de 285 mil jóvenes. Hace diez años, este segmento poblacional representaba 1.7 por ciento de los jóvenes, disminuyendo ligeramente a 1.2 por ciento en 2005.
La percepción generalizada de que existe una gran cantidad de jóvenes NINI no se refleja en las cifras de la ENOE. Con frecuencia, el volumen de la población NINI se sobreestima debido a una conceptualización parcial del fenómeno, ya que algunas estadísticas en torno a esta población incluyen en ellas a jóvenes que se dedican al trabajo doméstico, entre los que la proporción de mujeres jóvenes unidas es predominante.