10 julio, 2011
Por la REDACCIÓN
Con la presentación de la Obra Fausto, de la compañía teatral de Emmanuel Márquez, arrancaron este domingo con éxito las jornadas de la edición 26 del Festival Internacional de Títeres (FIT) “Rosete Aranda”, que este año convertirá a Tlaxcala en la capital mundial del títere.
La apertura del festival tuvo como sede el Teatro Xicohténcatl con la compañía teatral de Emmanuel Márquez, que donó al Museo Nacional del Títere (Munati) una pieza teatral llamada “De la oreja al corazón”, con un valor de 900 mil pesos.
En la apertura y previó a la presentación de la obra “Fausto”, el Secretario de Turismo, Marco Mena Rodríguez, señaló que esta donación al acervo cultural del Museo Nacional del Títere y al pueblo de Tlaxcala constituye un hecho trascendente y de gran valor para dar vida, tanto al festival como al propio museo.
Mena Rodríguez agregó que durante este festival que vivirá tres etapas -las jornadas, un coloquio internacional y el propio festival internacional – será exhibido el trabajo y talento de los creadores mexicanos en este ámbito y de las compañías teatrales extranjeras que se darán cita a esta edición 26 del festival internacional del títere.
Por su parte, Gerson Orozco, director del Instituto Tlaxcalteca de la Cultura (ITC), indicó que para las diversas instancias que forman parte en la realización de este festival internacional, la donación de esta producción teatral completa, que tuvo más de 200 representaciones en México y un gran éxito en Chicago, Estados Unidos, y que ahora forma parte del acervo del Munati, es un acontecimiento destacable que enriquece el acervo con el que cuenta Tlaxcala.
Posterior a esta donación, la compañía de Emmanuel Márquez ofreció la primera función de títeres en el Teatro Xicohténcatl, denominada “Fausto”, quien por su deseo de saberlo todo, exploró el reino del mal y de la oscuridad, para terminar como víctima de sus pasiones y debilidades.
Ambientada con música de Beethoven y de la ópera Fausto, de Gluck, la obra narra la tragedia del doctor Fausto, un infatigable estudioso de la ciencias que ve con tristeza al final de su existencia, que a pesar de haber dedicado su vida al estudio, se da cuanta de que no ha podido descifrar los misterios de la vida y del universo.