06 junio, 2011
Desde la REDACCIÓN
*Los Zamora, los beneficiados del poder
*¿Fuego amigo?
La renuncia de Serafín Ortiz: plan con maña
Claro está que el exgobernador del estado, Héctor Ortiz Ortiz, negociará con el presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa una candidatura al Senado o bien a la diputación federal, para su hermano Serafín Ortiz Ortiz, quien se perfila como el nuevo heredero de la trono del orticismo.
Quien más que Serafín Ortiz para continuar con una ideología de mantener el poder a costa del precio que sea y por lo tanto, Héctor Ortiz sabe perfectamente que su imagen está deteriorada, luego de que han salido a la luz pública diversas irregularidades que cometido junto con algunos colaboradores suyos.
También está claro que han pasado cinco meses de mandato de Mariano González Zarur y ni siquiera ha intentado tomar el poder de la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT) que sigue siendo el bastión de los Ortiz. Fue una promesa de campaña y no hay para cuando el mandatario estatal cumpla su palabra.
Al contrario, el adversario político ha agarrado más fuerza, por lo que la mínima intentona de González Zarur, para que el catedrático Raúl Jiménez Guillén llegara a la rectoría simplemente fracaso.
La imposición de Víctor Job Paredes como nuevo rector de la universidad es evidente y todo hace pensar que la maquinaría electoral está lista para hacerle frente a un marianismo desgastado y sin figura para las elecciones federales venideras.
Así es que veremos a Serafín Ortiz Ortiz en su incursión clara en la política y eso indica que gastarán los millones que sean para que llegue a ocupar un cargo en el Congreso de la Unión y por lo tanto, el PRI tendrá que sacar a un gallo de mayor peso para contrarrestar el embate del enemigo político.
¿Fuego amigo?
Desde el mismísimo sistema dicen que Mariano González Zarur, se dedicó a hacerle la vida imposible al originario de la comunidad de Acuitlapilco, Valentín Romano, hoy exsecretario de Seguridad Pública, toda vez que el gobernador no soportaba la idea de que una imposición de la federación ocupara dicho cargo.
En los corillos de Palacio de Gobierno, se sabía que la baja de este exfuncionario tlaxcalteca se daría en cualquier momento, toda vez que no soportaba la actitud de cerrazón y de intolerancia del mandatario estatal. Es más, hace más de dos meses esta misma columna adelantó que éste personaje polémico no tardaría en irse y así fue.
La versión de que Valentín Romano fue una imposición de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) cada vez toma más fuerza, por lo que González Zarur cumplió temporalmente con este compromiso y después lo rompió de tajo.
Otros dicen que fue un acuerdo con el exgobernador de Veracruz, Fidel Herrera para que éste personaje a quien ligan con el narcotráfico llegara a ocupar dicha secretaría, pero lo cierto es que durante su estancia en el estado, no supo qué estrategias emplear a fin de frenar la ola delictiva.
Por lo que ahora, el mandatario ha depositado su confianza en Rubén Santacruz Caltempan quien ocupó en su momento la dirección de gobernación y fue la época donde el espionaje telefónico y otras viejas mañas, propias del estilo priísta se fraguaron en Tlaxcala.
Lo cierto es que es un servidor público a modo y que está dispuesto a hacer lo que sea para que sea ratificado en el cargo, pero lo cierto es que sería un retroceso en materia de seguridad pública, aunque pregone González Zarur que tiene carrera en la milicia. Aquí lo que importan son los resultados.
Los Zamora, los beneficiados del poder
No sólo conformes con haber ocupado diversas carteras dentro del gobierno de Mariano González Zarur, la familia Zamora Alarcón originaria del municipio de Huamantla también se ha beneficiado con la renta de inmuebles al gobierno del estado, por lo que deja clara su ambición.
El asunto es que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes del Estado (Secte) le rentó una propiedad a la familia de Javier Zamora, extitular de la Secretaría de Obras Públicas, Desarrollo Urbano y Vivienda (Secoduvi) y cuya delegada en ese municipio es Malena Zamora, hermana del dueño de la exhacienda “La Escondida”.
Si esos no son excesos, pues que se diga otra cosa, pero lo cierto es que no se han conformado con tener diversos cargos en la administración pública estatal sino que ahora pretenden beneficiarse con este tipo de negocios. Y según Mariano González, su gobierno iba a luchar por los excesos en el poder. Vaya que son puras pal